Quizá debería hacer más cosas que no hago,
hablarle a la gente que me ha olvidado,
y acercármele a aquella,
que jamás me ha mirado.
Caminar por la calle
con rumbo perdido,
y abrazar a la gente
que camina buscando,
absorbente,
ese no-se-qué,
cuya ausencia, resienten.
Quizá debería hacer más cosas que no hago,
tomarle una foto, insinuar un cumplido,
Acariciar su cabello, con un gesto vago,
mirarla a los ojos, despertar, perdido.
Salir de mí con mayor frecuencia,
no pensar por lapsos breves, infinitos,
actuar con el alma, mostrarte quién soy,
y reír de repente sin saber dónde estoy.
Quizá debería hacer más cosas que no hago,
aceptar que esta vida es fugaz,
y que el día de mañana, lo que ya veías,
verás no más.